miércoles, 11 de octubre de 2017

Ecuánime



prisma hembra 

te atravieso 

como

si fuera 

una 

luz  

rayo fálico 

te espero 

te veo

llegar 

me abro 

la unión

deviene 

en 

calor 

energía 

inerte

fría

constituye 

la base

del mundo 

permanente. 

martes, 3 de octubre de 2017

Hogar

cambia el clima
los gatos se ponen inquietos
mi puerta se golpea con el viento
nuestros hermanos volvieron sucios
la lluvia cae
Padre fue a buscar comida
Madre no cree que vuelva
te escribo esto desde mi habitación
empiezo a sentir miedo
la soledad no es lo peor
en esta casa todo lo rodea
si vieras las paredes cómo se caen...
si vieras lo que hicimos con tu antiguo cuarto...
Madre tiene rachas de llantos
y a veces de furia
Carlos sigue con el ojo morado
casi no puede ver
Lidia es una sombra ausente
va en busca de leña y vuelve sin saber que lo hizo.
quiero saber de vos
hoy pensaba con sorpresa
y no me acuerdo hace cuánto tiempo te fuiste
ni si quiera puedo dar una cifra aproximada.
la niebla se hace espesa cuando salgo por la mañana
a veces creo que la niebla entra a la casa
y nos empuja a hacer cosas que no queremos
es una locura, no me hagas caso.
quiero saber de vos
queremos saber de vos
aunque hablar en nombre del resto es algo muy difícil
me cuesta recordar sus rostros cuando paso más 
de dos horas sin verlos
aunque sepa quiénes son
y cuando me los vuelva a encontrar
logre reconocerlos

sorprendí a Padre mirando tu foto más de una vez
sentí que tu perfecta sonrisa de adolescente se contaminaba
con la melancolía de Padre y adoptaba un tono solemne.
no puedo asegurar que padre quiera saber de vos
creo que prefiere seguir pensando que un día vas a volver
con la misma sonrisa de esa foto
aunque tampoco puedo asegurar que padre quiera nada
no estoy seguro de saber si los muertos quieren algo...
¡qué horror! estoy hablando como habla Madre
estoy pensando como piensa ella
no quiero seguir ese camino
porque significaría seguir sus mismos pasos, pero acelerados
y eso incluiría pegarle a Carlos de la misma manera en que ella le pega
pero entonces tendría que apuntar a su otro ojo
y ya no le quedaría ninguno 

Lidia volvió embarrada
Carlos también, pero Lidia no parece notarlo
le dije que fuera al baño a lavarse
pero se quedó parada frente a la puerta
acariciando a uno de los gatos que ella misma trae
ya son veinte o treinta gatos
Carlos trata de pegarles y yo no lo impido
porque son ésos los únicos momentos en que Lidia reacciona
se le vuelve roja toda la cara y mueve los ojos
como un animal herido

sonó el timbre
no es Padre
es Carlos que otra vez hace cualquier cosa
para frenar los llantos histéricos de Madre
en éste caso se le ocurrió salir
y hacer sonar el timbre como si fuera Padre volviendo;
ya Madre había tomado uno de sus sedantes
así que con ese estímulo pudo dormir
y la casa quedó en silencio;
a veces confundo el silencio con las penumbras
o confundo las palabras
pero quiero saber de vos
saber por qué inexorablemente siento
día tras día
que me voy debilitando
que mi cuerpo se reduce un poco
cada vez que clausuramos una parte de la casa
quiero saber si tuviste algo que ver
con la aparición súbita
de palomas muertas en la piscina vacía
o con la desaparición de los dientes de padre
que ya no puede masticar
y su flacura parece de segunda dimensión

quiero saber de vos
saber
por qué te fuiste por qué
las paredes caen por qué 
los padres mueren por qué 
las sombras pasan por qué 
el tiempo muere. 

señor de camisa blanca

señor de camisa blanca
que camina por Arenal grande
y me lleva unos cinco metros en la carrera
por llegar primero al semáforo
a mí que también camino por esa calle
y que lo acabo de ver
que acabo de notar que gira preocupado
para mirarme de reojo
para vigilar cómo me muevo
qué ropa llevo
y si tengo las manos en los bolsillos
señor de camisa blanca
usted que camina despacio
que no puede con la subida
que sufre la humedad de la tarde
repite el proceso de mirarme y trata de ocultarlo
pero yo, que camino más rápido
que ya estoy acostumbrado
a que me adjudiquen con la mirada
el papel de posible joven peligroso
ya me di cuenta de lo que usted piensa
conozco su paranoia como si fuera propia
señor de camisa blanca
ya casi llegamos a Colonia
lo alcanzaré o usted doblará y yo seguiré en la misma dirección
y comprobará que soy una buena persona
y respirará aliviado
pero yo no sabré cómo descartar
cada vez que aparezca
la resignación de ser por unos segundos
aquella entidad abstracta
el miedo encarnado del trabajador
el tramo incierto de cada barrio
la inseguridad de las estadísticas
y la inseguridad como palabra del momento
señor de camisa blanca
usted tiene la culpa
esto es una persecución a la inversa
en cualquier momento podría girar
y mirarme a los ojos
la bajada lo favorecería
señor de camisa blanca
todavía no llegamos a la esquina
y yo, que ahora le respiro en la nuca
que no puedo controlar las piernas
yo que tengo nombre y edad
y voz y aspecto
pienso en lo bueno que sería
que doblara en mi dirección
una masa compacta de personas apuradas
que me tragaran y me eximieran de ser
lo que no quiero ser
y de hacer lo que acabo de hacer
señor, es su culpa que la camisa
ahora sea roja
y que nunca vuelva a ser capaz
de cruzar un semáforo.

Brisa

espíritu marino
frecuencia inherente al río
necesito que me lleves
hacia un lugar seguro
donde sólo se me exija contemplar
olas que nacen
y dan a luz instantes
olas que mueren
y fecundan el resto del mar
donde mi contemplación
sea parte fundamental de la maquinaria
donde no exista la palabra caos
y entienda todo sin necesidad de pensamiento

soplo nocturno
antesala del devenir
no quiero buscarte
quiero que me encuentres
para no sentir que siento necesidad
te pido que me hagas olvidar
cada una de mis plegarias
inclusive éste pedido.